La crianza de los hijos es un proceso muy complejo para el cual nunca estaremos totalmente preparados. Nuestro marco de referencia es la experiencia que vivimos en nuestro proceso de crianza con nuestros padres, con todas las imperfecciones que acarrea el proceso. Cuando se asume la maternidad sin una figura de un padre, el reto de la crianza se acentúa.
¿Qué necesitan las madre solteras prestar atención?
No querer asumir el rol de madre y padre
El refrán popular que algunas madres solteras utilizan yo soy madre y padre es una falacia. La figura paterna es una figura de importancia en la crianza de los hijos y hay que reconocer que esta falta tendrá un impacto en la vida de los hijos. Cuando reconocemos esta falta, permite que la madre solo trate de asumir su rol de madre, sin tratar de sobre compensar la falta de un padre.
Personas significativas pueden proveer un rol paterno
Ante la falta de la figura paterna, existe la posibilidad de identificar personas que pueden proveer una figura paterna a su hijo/a, aunque nunca sustituirá la figura de un padre. Estas personas puede ser un abuelo, tío, padrino o alguna otra persona significativa que pueda proveer ciertas experiencias que los hijos/as viven con un padre.
Proveer estructura
Muy probablemente, asumiendo la maternidad sola, puede requerir una jornada de trabajo extensa para poder cubrir los gastos del hogar. Aunque la parte financiera es de suma importancia para proveer y suplir a los hijos de sus necesidades básicas, es importante proveer estructura y supervisión. Buscar una red de apoyo con la familia extendida o personas de confianza para asegurar que los hijos/as tengan la supervisión necesaria, para guiarlos a través de sus diferentes etapas de su desarrollo.
Tratar de identificar trabajos que coincidan con los horarios de la escuela, pudiera prevenir o minimizar el tiempo de ausencia en la vida de los hijos.
Buscar apoyo
Identificar programas en la comunidad que sean de apoyo en la crianza pudiera ser de mucho beneficio. Por ejemplo, identificar programas en los cuales sus hijos/as puedan participar (ej. deportes o programas académicos). Aunque asumir la maternidad sola puede ser uno de los mayores retos que una mujer pudiera enfrentar, hay recursos disponibles que pueden ayudar a que seas una madre lo suficientemente buena; que después de todo, eso es lo que nuestros hijos necesitan.